Las mujeres de la Mendoza colonial lejos de presentar un grupo homogéneo, mostraron una rica diversidad. Al grupo de las españolas y criollas se sumaban las indias y negras y, por supuesto, las mestizadas. Pero, además de los grupos étnicos, las mujeres también ocuparon distintos lugares en la sociedad colonial estamental según su nacimiento y lazos matrimoniales. De todos modos, más allá de etnias y status sociales, todas eran mujeres y, por lo tanto, se encontraban en un lugar secundario y subordinado respecto de los varones.
El matrimonio era la institución que permitía la propagación de la especie y, por aquel tiempo, estaba regulado por la Iglesia. Cabe aclarar que en la mayoría de los casamientos de la etapa colonial solían primar intereses políticos y económicos más que el amor de los contrayentes.