A
D
F
G
H
I
K
N
Ñ
O
T U V W X Y Z

 

 

Contreras, Francisca (siglo XVII)

Hija del capitán Juan de Contreras, dueño de una extensa estancia ubicada en el Valle de Uco; al morir el capitán, su hija Francisca donó a los jesuitas dicha propiedad, según refiere Juan Isidro Maza.

Los religiosos la usufructuaron hasta 1767, año en el que fueron expulsados de todos los dominios americanos.

 

 

 

Corvalán, Andrea (1729-1796)

Esclava mulata, hija de Mariana, natural de Guinea, y de padre desconocido, probablemente un español o criollo vinculado a la propiedad de la hacienda, considera Pablo Lacoste. Andrea fue comprada por doña María Corvalán en $500 y se especializó en trabajos artesanales calificados; llegó a tener su propio torno de cernir, con el que procesaba la harina de trigo y la separaba del salvado.

Se casó con Pascual Suárez, criollo de modestos recursos, oriundo de Santiago del Estero y radicado en Mendoza. Tuvieron tres hijos: Luis, María Dominga y Roberto, y se embarcaron en una larga batalla judicial para obtener la libertad del primero, conseguida luego de un proceso extenuante.

 

Corvalán y Castilla, María (siglo XVIII)

Perteneciente a una de las familias más poderosas de la Mendoza colonial, esta mujer era hija del capitán y encomendero Antonio Corvalán y de doña Magdalena Arias Molina Videla. Se casó con un hombre distinguido, el capitán Luis Chirinos de Posadas, propietario de uno de los molinos más importantes de Mendoza. Enviudó muy joven y asumió la dirección de su hacienda que incluía el molino harinero y esclavos, además de una valiosa tierra ubicada junto al Camino Real, al norte de la Plaza de Mendoza. No volvió a casarse y hasta su muerte mantuvo su plena autonomía legal y económica, refiere Pablo Lacoste.